Joel Calata
EditorNatalia Streignard fue durante muchos años uno de los rostros más populares y queridos de las telenovelas latinoamericanas. Su belleza, carisma y talento la llevaron a protagonizar éxitos como 'Mi gorda bella', 'La Tormenta' y 'Anita, no te rajes', convirtiéndose en ícono de la pantalla chica a principios de los años 2000.
Sin embargo, en el punto más alto de su carrera, la actriz venezolana tomó una decisión que sorprendió a sus fans: se alejó por completo del mundo del espectáculo.
Natalia Streignard, nacida el 9 de septiembre de 1970 en Madrid, España, y criada en Venezuela desde los tres años, es una actriz que dejó una huella imborrable en el mundo de las telenovelas. Su ascenso a la fama comenzó tras su participación en el certamen Miss Venezuela 1992, donde obtuvo el puesto de segunda finalista y representó al país en concursos internacionales como Miss Turismo Internacional y Model of the World.
Su debut la televisión fue con la telenovela "Pedacito de cielo" (1994) donde rápidamente se consolidó como protagonista de otras producciones como "Sol de tentación" (1996) y "La mujer de mi vida" (1998). Sin embargo, fue su papel como Valentina Villanueva en "Mi gorda bella" (2002) el que la catapultó al estrellato internacional.
Sin embargo, en 2008, después de haber terminado la telenovela "El juramento", decidió dejar el camino de la actuación para enfocarse en una de las grandes metas de su vida: el convertirse en madre.
La razón detrás de su retiro fue mucho más profunda que un simple cambio de rumbo profesional: Streignard fue diagnosticada con lupus, una enfermedad autoinmune que no solo le afectó su salud física, sino también emocional, ya que impactó directamente en su deseo más profundo: durante años, Natalia vivió un calvario silencioso al experimentar cinco pérdidas de embarazo, una experiencia devastadora que la llevó a replantearse su vida por completo.
Al contraer matrimonio con el empresario Donato Calandriello se establecieron en Miami. La pareja ahora tiene tres hijos: Jacques (2011), Gia (2014) y Gianni (2017). Desde entonces, Streignard ha llevado una vida enfocada en su rol como madre, compartiendo momentos de su día a día y rutinas de ejercicio a través de sus redes sociales, donde mantiene una conexión cercana con sus seguidores.
Actualmente, aunque en ocasiones ha recibido propuestas para regresar a la televisión, ella misma ha declarado que no está entre sus prioridades, pues su tiempo y energía están totalmente dedicados a su familia.
"Me encantaría regresar a las telenovelas, pero ahora mi prioridad es mi casa, mis hijos, mi vida de mamá. Ellos me necesitan más que nadie", dijo en una entrevista para El Cooperante.
Fotos de IMDB | natystreignard
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